Algunos problemas oculares son menores y efímeros. Pero otros, pueden causar pérdida de la visión permanente.

Los problemas  oculares comunes incluyen:

Cataratas: opacamiento del cristalino

Glaucoma: lesión en el nervio óptico por un aumento de la presión del ojo.

Enfermedades de la retina: problemas con la capa de tejido  sensible a la luz que se encuentra en la parte posterior del ojo.

Conjuntivitis: una infección de la conjuntiva

Su mejor defensa es hacerse chequeos regulares, porque las enfermedades del ojo no siempre tienen síntomas.

La detección temprana y el tratamiento precoz pueden prevenir la ceguera. Si presenta cambios repentinos en la vista, tiene la vista borrosa o ve destellos de luz, busque inmediatamente la ayuda de un profesional especializado en cuidados oculares.

Otros síntomas que requieren atención rápida son dolor, ver doble, secreción líquida en el ojo e inflamación.