Autor: Consuelo Ramirez
Todavía no se termina esta etapa, seguimos con la crisis de esta pandemia y por lo que se ve, continuará para el próximo año. Hemos tenido muchas pérdidas, económicas y físicas; esto último lo que más duele ¡No hay que darnos por vencidos!
Los que se fueron dejaron mucha tristeza con su partida, pero ya no están aquí y nosotros sí. Aquí seguimos con un compromiso de vida de seguir adelante, luchando, trabajando, emprendiendo. No podemos cruzar los brazos y decir ¡No, ya no! ¿Sigo por decisión propia o por falta de iniciativa?
Seguiremos por los que están, por los que nos necesitan, por nosotros mismos y honrar la memoria de los hoy ausentes. El emprender en todos los aspectos de nuestra vida requiere de una exigencia, un esfuerzo que tiene un valor representativo y más cuando esta ligado a lo que más queremos.
Pregunta, investiga, documéntate. Si tienes que aprender algo nuevo ¡Hazlo! Como muchos que han transformado esta crisis en una oportunidad de transformación y aprendizaje. Un ejemplo simple; una revista, que no puede producir físicamente su edición por falta de recurso, aprovecha la oportunidad que brinda la tecnología para salir avantes manteniéndola en línea.
A veces nuestras herramientas básicas y conocimientos no son suficientes, pero existe el trabajo en equipo, las personas que participan de la mano contigo. Amigos, compañeros, colaboradores, que trabajan por una misma labor. Los cambios, la innovación y propuestas frescas vienen de nuestra capacidad de discernir y sobreponernos a dificultades mayores para que el barco se mantenga a flote.
Sigamos adelante dándonos apoyo unos a otros y dándole gracias a Dios por seguir aquí. Se puede descansar, pero no se vale tirar la toalla. Porque ese es el legado que vamos dejando a los que siguen en este mundo. ¡NO TE RINDAS!